EZEQUIEL WOLF

lunes, 30 de julio de 2012

VEOQUEVESLOQUETUSOJOSVEN




I
Veo en tus ojos el encantamiento de escucharme leer encorvada y en voz alta.
sobre la mesa redonda y alfombrada con un paño color borravino en el estudio en voz alta,
mientras leo los textos por primera vez y me hago sombra con el pelo suelto.

II
Veo en tus ojos que leo los textos con fuerza y sin miedo a preguntar.
Bien, mejor,  sobre todo ahora
que parece que todo está tan cerca de las manos que para qué preguntar,
si total todo está ahí, casi al alcance,
pareciese que ya no hiciera falta preguntar
porque todo se da por sentado y en realidad es la duda el principal y primer miedo.
Miedo a preguntar, miedo a ser salvaje,
y mientras tanto yo te digo
estoy buscando alguien que pueda encender mi cuerpo con palabras propias en este amanecer amarillo,
pero seguimos con eso después porque ahora quiero seguir leyendo.
No quiero tomar nada gracias, sino me vuelvo dependiente
y en ese ataque la maldita sensación que la garganta se me seca
y en la boca se empastan las palabras,
de todas formas si los jadeos molestan mucho avisame,
es sólo que no quiero acartonar las palabras,
y como lo que estoy leyendo es una suerte de plegaria y lamento,
pensaba yo que el hecho de entrecortar algunas palabras
o bien estirar pronunciaciones arrastrando algunas letras
sirva para quebrar la rectitud prolija de las respiraciones de los locutores en serie.

III
a)Veo en tus ojos que tenés algo que decirme,
si es así adelante que estoy acá para eso prestándote mi voz,
y todo lo que quieras, todo lo que veas que no va o que no te cierra
o falta algo marcalo, marcame todo ,marcámelo todo.
Dirigime.
Es más fácil para mí y también para vos que sos quien sabe de esto.
Yo sólo sé que quizás esto tenga una métrica
y a su vez una musicalidad propia al hilar cada una de las palabras,
pero es que esta es la primera lectura que yo hago de esto.
Paciencia.
Quiero encontrar la manera para que lo que está escrito sea en mi voz,
porque todo tiene una sangre, una miel,
un vacío, un grito, un mar,
una piedra, una flor, un color.
Todo tiene algo allí esperando para explotar en el primer instante que lo saque del ostracismo hacia el afuera de la luz,
y amanecer en el mundo una vez más,
resurrección que rueda por las hojas
y las manos a lo largo del papel
y se mezcla con el aire espeso y dulce de la respiración
en la lectura que rebota haciendo eco de la propia voz en busca de esa voz.

b)¿Qué si soy de verdad?
¿En serio me preguntás esto?
Quizás deberías aprender a manejarte con las palabras y tu cuerpo antes de salir a hablar… ¿No? Ja!
Es un chiste eh!, después de todo un poco de humor de este lado no está mal para ablandar al cuerpo. ¿No?

c)Bienaventurados todos nosotros en este festín,
ensalzados de barro y morbo
entre cables y paredes encerrados a la distancia
con un vidrio que nos separa de la superficie como peces,
en un mundo sin agua, a destiempo del día y la noche.
Atemporales…
Qué se yo mi cuerpo, mis manos.
Me muevo mucho y también, a veces, hablo por demás
y me corrijo lo que estoy diciendo antes de terminar…
Pero bueno, basta ya de cuerpos tiznados por voces que no marcan la piel,
y sólo la soplan sin siquiera tocarla.
Basta ya de cuerpos sin color.
Quiero dejar mi voz en estas formas y por eso estoy aquí.
Porque vine para esto, para aprender, para bailar en la danza de las palabras…

IV
Veo en tus ojos que soñás despierto y con los ojos abiertos,
abriéndote en el río de las palabras que escribis casi sin parar,
y todo el tiempo.
¿Siempre tenés más?
Brindo en este pulso inquieto por el no miedo al ridículo
aunque después de todo esto no soy más que una tímida borracha,
porque esto es lo que estoy haciendo,
emborrachándome para que el corazón se desarme hablando
mientras que la lengua entre dormida e intermitente
sólo se encarga de hacer las piruetas necesarias
para que del aire que sube desde los pulmones,
los ruidos sean algo así como un manojo de palabras…

domingo, 29 de julio de 2012

HORA:2:17AM EN CUALQUIER LUGAR, EN CUALQUIER CIUDAD


Geena acostada en el sillón, al borde de la ventana que da a la calle lee un tratado sobre el arte de las manualidades y la relación con la masturbación.
El libro según se dice es uno de los tantos diarios que Cristina supo leer en aquel antológico programa radiofónico donde se leían cartas, donde los oyentes llamaban por teléfono, donde ella se extrañaba de que el programa fuese grabado para la posteridad, donde hasta había gente que iba a ver el programa en vivo, donde había una biblioteca circulante de cassettes grabados comandada por el mismo
programa, Cuadernos del puerto.
“…con la mano derecha abierta, todos los dedos bien separados entre si,
para que el aire pueda rodear todas las extremidades del cuerpo
y enroscarse allí y desarmarse y volverse formas.
La palma de la mano apoyada sobre la ingle
y con el dedo pulgar como gacho para bajar el pantalón lentamente
y demostrar que debajo de la ropa hay carne,
porque todavía queda carne rodeada por piel.
La mano se abre y se despliega
y los dedos mayor y anular juntos como si fueran uno bajan
y van a fondo.
El masajeo suave de subir y bajar
se enrolla entre rulos que se erizan
y parecen electrizarse con la respiración
que empieza a calentarse,
el aire tibio se cocina en el cuerpo
y las narinas no alcanzan
y la transpiración avanza
y los ojos entrecerrados se guardan e indagan en el teatro de las sensaciones que es el cuerpo
y los párpados presionan egoistas
y los labios se mojan
la lengua se pega
el paladar se ensalza
la boca busca poner en palabras
pero el cuerpo y la cabeza están en otro lado
y por eso hay gemidos entrecortados como espasmos
y los dedos anular y mayor salen de la flor
y acarician hasta acabar buscando la luz
esa sensación de insaciable saciedad como si fuese la sombra
porque es en ese momento
en el que la piel de los dedos
empieza a acariciar lo mojado entre gritos
con la yema de los dedos..."
Y entonces como si hubiese arrancando una ficha estamental de jenga
su cuerpo se desarmó.
Geena dejó caer el libro sobre ella en un trance relajada por las instrucciones del libro.
Las persianas estaban abiertas,
las cortinas blancas corridas a un costado de la ventana cerrada.
Geena con los ojos cerrados, musculosa levantada con una mano acariciándose una teta
y con la otra dentro del pantalón cuando el celular la despertó.
Geena se levantó del sillón sin dejar de tocarse el cuerpo,
porque acababa de acabarse.
Empezó por perderse
 y acabó redescubriéndose, mitad despierta y mitad dormida,
ensoñada y consagrada a si misma,
en una oda la masturbación como un mantra.

viernes, 27 de julio de 2012

Vibración o Muerte



Y ahí estás mirándome dormida
soy tu carne de sueño y me mordés para arrancarme
para agarrarme con tus piernas enrolladas a mí sujetándome,
volviéndome sujeto tuyo en sueños;
Y yo a tu servicio soy tu cuerpo en sueño
y me mordés la oreja
y me mojás la escucha que se humedece
que se vuelve música otra vez
otra vez en tu lengua
tocándome con la palma de tus manos
recorriéndome horizontal
desde mi hombro derecho
enfrentados los dos
con la yema de tus dedos hasta la mitad del cuerpo
helándome un segundo antes de tocarme,
y me das vida otra vez
con tus dedos fogosos de magia
y me bajás la mano apoyada contra una pared
sosteniéndome
y rendido vos desplomándote hacia delante
como habiendo dejado de latir.
Y entonces tu brazo izquierdo
alrededor de mi espalda se anuda
y vos figurás en mí
movimientos en espejo
sueños en serie
serie de sueños en espejo
atravesados en realidad
atravesándome a mi de espaldas
despierto siento tus dedos como alas,
te siento esculpiéndome.


-Acá tenés mi nombre, envuelto en carne y derramando lágrimas...
-Bien. Confío, entonces en que te quedes, en que te puedo tocar...
-Podés confiar, podés tocarme, podés morderme, podés hablarme,
podes escribirme, podés hacer lo que quieras, vos me trajiste hoy acá,
vos me imaginaste.
-Puedo callarte también.
-Podés comerme también.
-Cerrá los ojos.
-¿Qué me vas a hacer?
-Quiero que cierres los ojos, que respires el aire caliente que sale de mi voz,
la sangre, mi respiración.
-Quiero que dibujes mi boca carnosa con tus dedos de pan
como en el capítulo 7 de Rayuela, cuando Oliveira le toca la
boca a La Maga.
-Yo quiero que cierres los ojos y que me mires. Quiero
desnudar nuestra incertidumbre nena y creo que así, al ritmo de
la respiración vamos a hacerlo y bien, ya vas a ver. Vamos a
navegar con nuestros ojos bien abiertos.
-Y bien adentro.
-Y bien adentro también.
-Bien.
-Bueno. Contame ¿Dónde estuviste? ¿Qué anduviste haciendo?
-Si te parece descorchate un vino y que las copas empiecen a hablar…
-A tu salud entonces!
-A tu imaginación.
-Y a tu sangre.
-Y a tu sangre.


Soñé que eras la madre entre las sombras de una cama en llamas.
Llave de placer decantado mi lugar en el mundo
y no había tiempo para elegir entre la luna y el sol,
y vos como cielo abierto en las sábanas del jardín
teñiste los cuerpos en una guerra de estrellas,
constelaciones de besos y piernas rojas de tanto caminar de un lado a otro,
siempre en acción conjugando verbos,
como en el poema 12 de Girondo 
que reina en la pared de una casa en algún lugar no tan cercano.


Entre risas tímidas, se sabe, hay algo que está muriendo.
El remolino avanza otra vez,
el aire se confunde entre perfumes viejos y olores cansados.
La luna no se asoma a la mesa,
sabe que mostrar la cabeza podría dar lugar a la muerte.
El sol por su parte no piensa tampoco en decir que si,
porque sabe que hasta él mismo podría quemarse
y consumirla habitación.
Las manos limpias,
los brazos manchados de transpiración,
flujos exprimidos que chorrean de tus dedos,
jugos hartos de sutilezas que entran y salen progresivamente hasta ver la luz,
y al llegar a la exhalación,
el cuerpo se desarma en un suspiro
que sale desde adentro de la piel que estalla,
y ahí están los dedos
y vos
 en el vacío de la masturbación que ya no necesita fotos,
tan solo cerrar los ojos…


…y a oscuras, te veo en tu habitación,
revelándote,
revelándome en tu cama a oscuras y aplaudís.
Yo lo sé, yo te escucho,
y aplaudís para no perderte, aplaudís marcando el tempo.
La secuencia que tiene lugar en tu lugar,
halos que se imprimen en luz en tus ojos desde el recuerdo.
"Es tiempo de sentir" decís,
respirás hondo sin llegar a marearte,
y reacomodás los almohadones de tu cama para acostarte sobre ellos otra vez.
Una vez reacomodado todo,
volvés a la memoria en la ceremoniosa oscuridad
y revelándome te hundís en tu propia respiración que se agita de a poco progresivamente,
hasta que tu voz se escapa de tu boca gritándome
y ahí te despertás,
sorprendida, transpirada, húmeda
y con la mano derecha dentro de tu pantalón.


Pétalos que suben y bajan agitados, agitados en busca del rubor.
En nombre del amor, necesitados de sentir calor y que el ardor
camine tan figurativo y tan incesantemente dulce por los lirios.
Flores amasadas que se funden cuando entran en color y se desarman,
pierden el gesto hasta que finalmente deshojadas caen.

jueves, 26 de julio de 2012

ADOROLATELETRANSPORTACIÓN.


Con una mano la abraza, la lleva contra su cuerpo.
Necesita tocarla, tenerla ahí,
sentir las vibraciones de la sangre dentro de las venas,
saber que es carne y hueso.
Toca su piel porque la quiere viva.
Con la otra mano, se acomoda
y el brazo que la abrazaba se estira más.
Juegan frente al televisor y de espaldas a la música,
“siempre tan selecta con las agujas del reloj”.
El le acaricia los labios,
labios de miel, labios de ensueño,
labios que él alguna vez hasta supo dar por muertos.
Ella se escurre inmóvil y sólo deja ahí su cuerpo,
porque sus ojos y su verbo ya están en otro lado.

miércoles, 25 de julio de 2012

LABOCAMARCADAPORLASUVASDELVINO.


Vos viniste a mí desde el sol masticando tus labios rojo vino, vestida en seda.
Mi amor desfilando en la avenida tus ojos de nácar, porque hubo algo más que la puerta que se abrió cuando el respeto de tu voz quebró el silencio quieto y muerto de mi habitación en una noche caliente de invierno.
Yo estaba solo en el sillón dibujando el arte de mi cuaderno de odas masturbatorias cuando vos me dijiste “Buenas noches amor, vine a vos desde allá, desde el sol, ya no me esperes al alba. Vine para quedarme, para que duermas conmigo”.
Y me respiraste agitada sin tocarme.
Acercaste tu boca a mi nariz arrodillada sobre mis piernas y sin mirarme a los ojos “para empezar-dijiste- por hoy prefiero mirar a la pared. Después mañana, amanecidos los dos bajo la luz del sol que se cuela por la ventana abierta e iluminando el cielo azul y acá vos y yo, los dos, con esta música liviana… ¿Quién sabe?”
Afuera llueve y Buenos Aires se humedece, y yo quiero pedirte que hurgues en tu pantalón,
en serio, fijate que te compré un jazmín amarillo, está casi seco, como por perder el color.
¿Cuánto tiempo más para salir a caminar?
Nena!!! Por favor te pido que bajemos. Quiero que te lo pongas en el pelo. Me gusta pensar tu cara coronada por el jazmín amarillo. En serio te digo. No me mires así.
Daría cualquier cosa por salir a la calle ahora a caminar bajo la lluvia, vos con esa flor enredada en tu cabeza y yo jugando a perder el aliento. Pero ahora que lo pienso podemos cambiar el disco elegir como punto de partida alguna canción que nos incite a bailar a los dos, acá, adentro en el sillón, parados en la cama, con almohadones o almohadas mojadas en el piso del baño, en las sillas de la cocina o desnudos en la ducha, o empapados y envueltos en el balcón. Una fiesta, una celebración por el hambre resentido que durante tantos años sólo conversé yo conmigo y consolé yo solito con mis manos.
Después podemos sentarnos los dos a tomar el té en la cama, como al borde del precipicio del reino de la comodidad, casi listos para subirnos al tren del sexo. Vos vas a enseñarme a escribir y a no respirar tan alto y yo voy a hacer lo propio con tus pinturas y el sentido de la elegancia y el respeto por lo propio y por lo ajeno sin sentirlo sólo como distancia.
Ahora que lo pienso quiero que también arregles el agua caliente  y dibujes en mi frente la forma de tu boca con tus labios a cada hora y yo a cambio prometo arrodillarnos en las arenas del sur por lo menos una vez al mes.
Podemos ir a pie o en sueños.
Y es más.
Si estás dispuesta podemos ir en tren, y ahí ver que la ciudad fuera de temporada es una ciudad desolada, desvastada por la guerra o incinerada por el mismísimo sol y entonces vas a decirme que no te importa no poder meterte al mar porque lo que te gusta es caminar por la orilla, y que sólo te interesa viajar al sur para escuchar el rugir del mar sentada en las piedras y cada vez que yo no quiera verte dormir vos vas a salir corriendo a buscarme
y yo voy a recordarte que vos viniste a mí desde el sol masticando tus labios rojos de vino.

martes, 24 de julio de 2012

sábanas de ensueño


Y pienso en cuántas formas hace un cuerpo en las sábanas las sábanas que duerme.
Y mientras las sábanas duermen, pienso si las formas son 2, 114 o 792.
Pienso en el cuerpo que duerme conmigo sobre las sábanas
y que cuando salga del baño vuelverá a acostarse al lado mío.
Pienso en que el cuerpo que duerme sobre las sábanas puede hacer 2, 14 o 178742 formas o muchas otras tantas más cuando está conmigo.
Y entonces la veo venir
y en ese andar veo como sus dos piernas son gobernadas por su ritmo
no siempre siguen el tempo del corazón de la miel o de las mariposas en la panza, no.
Veo que camina marcando el tiempo de su corazón bombeando sangre
aunque por ahí entre sístole y diástole
la cara interna de sus rodillas se choque sin llegar a tocarse,
sólo rozándose.
Y ella peina su sexo enrulado y me mira sonriente
y un hilo de baba sónica chorrea de mi boca y cae sobre el cuaderno
y es ahí cuando suelto la mano para limpiarme la boca
acto reflejo de la erección que despierta en mí ese cuerpo,
y la lapicera se me cae al colchón primero para morir en el suelo después
y ella gatea hacia mí lentamente
agarra la lapicera con los dientes y sube a la cama
y sigue gateando hasta mí para detenerse entre mis piernas
y lejos de levantarme la voz
me escribe en el muslo mientras me susurra
“te estoy leyendo eh, te estoy leyendo.
Siempre te estoy leyendo”.

domingo, 22 de julio de 2012

El guion de los sueños

Hace un tiempo empecé a pensar en la idea de poder escribir para bajar la calentura.
Quiero decir:
Plasmar en el papel con palabras todo lo que mi cuerpo necesita sacar
lo que tengo que y quiero dejar salir
Ahora bien:
De un tiempo a esta parte lo hago,
pero ya en un sentido más literal más carnal, más sexual, más jugoso, más crudo.
Lo que me pasa con eso es que escribiendo me transporto, me subo y me voy,
y después siento que no puedo bajarme,
que estoy duro y no puedo volver,
porque aunque el cuerpo no me acompañe no puedo parar la cabeza,
y es entonces cuando finalmente caigo,
y todo sigue como antes pero más desatado,
el tiempo y la naturaleza me piden que me exprima, que saque a la luz pero no,
prefiero jugar a ser egoísta,
y por eso es que desde hace unos días prefiero dormirme
y que sea en sueños donde los deseos y fantasías sucedan, cobren vida tengan en otro lugar.

sábado, 21 de julio de 2012

Aquí en nuestro panal.


Tus piernas largas traslucen el camino
y yo creo en tu imaginación
a orillas de tu habitación,
estás descalza.
Me lees unos poemas que me escribiste
y te gustan tanto.

Me gusta cuando me lees en voz alta
como si fueras masticando y construyendo el cuerpo del poema con los colores de tu voz,
como cantando.
Bailás cada palabra y das lugar a la lluvia para tocarme la cara
y mojarte conmigo en esta pieza de luz a oscuras.
Siento tus rodillas caerse
con todo tu peso sobre mí...

/y sé que revolcados los dos vamos a derramar la leche buena,
piel con piel,
mojados los dos en esta pieza de luz a oscuras.
Nudo de cuerpos tibios
que sirven siervos a la fiebre del amor,
sin miedo a caer en preguntas que sólo se responden en silencio.
dos mitades buscando todo el tiempo una nueva forma, atravesados por el hilo de una historia
siempre a punto de estallar,
inundándolo todo con fotos y silencios
entrecortado por espasmos silenciosos y temblores,
y niebla y sexo y calor.
Noches largas.
Largas como casi mil días sin amanecer al sol/

... y entrecortando las palabras del poema contra mis labios
encendés un fósforo en la oscuridad para mirarme a los ojos
y decirme que yo soy tu talismán,
y que querés hacerlo todo otra vez aquí en nuestro panal.

Antropofágicamente

Veo tu boca de carne roja que me llama evanescente.
Me llama tu boca joven.
¿Qué busca? ¿Qué espera? 
Corona de amor pulpa roja y brillante
 frutilla que quiero morder de espaldas al mar. 
Te veo descalza en la arena mojada 
tus pies sumergidos y me das hambre… 
Voy a comerte los dedos cuerpo de luz sin par. 
¿Dónde estás? ¿Dónde fuiste? 
Pienso darte una flor, tallarte un árbol. 
¿Qué gritan tus ojos? 
Porque cuando te encuentre voy a comerte los dedos. 
Porque cuando te encuentre voy a morderte los dedos 
Porque cuando te encuentre voy a darte mi piel. 
Y sí, porque cuando te encuentre 
también te voy a morder las manos 
y ahí vas a ver…

jueves, 19 de julio de 2012

Tú, Boca.


Bailo el vals de las fotos matizadas:
La mesa habla sobre la canción y las tazas.
Una foto una conversación.
Doy el último sorbo y apoyo la taza con la mano derecha en el plato.
Levanto la cabeza y ahí estás vos.
Te miro a los ojos. Te veo.
El pelo, siempre descontrolado.
Tu nariz todavía tiene crema.
Y así bajo hasta tu boca.

Siempre veo tu boca:
Me gusta tu boca.
Me gusta la forma de tus labios.
El foco de las fotos se pierde ahí
en tu carne,
no hace falta que mires a la cámara
no hace falta ya tampoco que sonrías si no querés.
Dije y digo que me gusta tu boca.

Me pienso cayendo sobre vos y dudo:
Dudo si morderte la boca.
Dudo si abrirla con mi boca hasta fundir las dos bocas en un mismo mar.
Dudo si cerrar los ojos a medida que me acerco a tu carne.
Dudo si tocarte la boca con la yema de mis dedos para dibujarte y sentir
cómo la boca tuya dibuja mis dedos y me carga de sentido a mí.

Me unen a vos tus labios:
Tus labios materia
Tus labios forma.
Tus labios sustancia.

Y tu cuerpo todo:
Me vuelvo susceptible a tu boca y sé que detrás de todas las palabras estás vos
Cuerpo de flores y miel abierta y hambrienta
Cuerpo de amor y de pecas
pero tu boca en mí es algo más,
tu boca hecha para mí es algo más que un desliz.

Quiero morderte y tengo mis razones:
Tu boca me llama lentamente
me dice que ya la conozco
que no quiere morderme
que soñó alguna vez con probarme.


El jugo de tu boca, de tu pulpa:
Pulpa.
Me gusta el jugo de tu boca cuando bosteza
porque el labio de arriba se vuelve sólo una línea
una línea que se pierde con abrís la boca
en el bostezo propiamente dicho
y el labio inferior es tan carnoso.
Me gusta verla.
Me gusta tu boca y no necesito más.
No te pido mucho más de vos sólo quiero tu boca.
Sólo quiero que me des tu boca para sentirla cerca.
Quiero sentir tu boca sobre la mía.
Quiero sentir tu boca contra la mía.
Quiero sentir tu boca con la mía.
Quiero que tu respiración asfixie mi boca.
Quiero que mi boca ventile a la tuya convidándote mi aire.

Elijo tus labios porque siento que me hacen menos solo:
Labios rojos. Labios tuyos.
Labios rosas. Labios carne.
Labios dulces. Labios mar.
Labios crema. Labios míos.
Labios terciopelo. Labios tiempo.
Labios calor. Labios color.
Labios flores. Labios memoria.
Labios dibujados. Labios fuego.
Labios intermitentes. Labios viento.

Siempre veo tu boca:
Me gusta tu boca.
M gusta la forma
Me gustan tus labios y estoy dispuesto a dar la vida por ellos.
Después de todo qué más me hará un poco más de desvelo e insomnio
si voy a llevarme la carne del sueño.

miércoles, 18 de julio de 2012

acá algo más que la puntita



algo que no será tan fácil sacarlo de adentro de una vez y para siempre

algo que entra algo que no sale
algo que te recorre desde el lóbulo
y despacito te entra por los ojos
y sale por la boca enredado en tu lengua
y cuando querés cerrar la boca te das cuenta que no podés
porque hay algo que se metió adentro tuyo,
algo que se despertó,
algo que necesita ser abierto,
algo que exige ser manifestado,
algo que puja, que pide salir, que pide a gritos ver la luz,
incluso con la luz apagada, en pleno sol, de noche bajo un cielo estrellado,
en las puertas del mar bajo una tormenta feroz como esas en las que a uno jamás le gustaría estar
y que preferiría verla por televisión, o al menos del otro lado de la ventana, tapado,
y en una cama con alguien más jugando a encontrar lugares y sensaciones todavía no conocidos del cuerpo de los dos.
-----DE AQUI PARA ABAJO TUVO LUGAR LA TERTULIA
OBRAS COMPLETAS DE CASSANDRA Y DANTE EL 27/06/2012
EN EL SIGUIENTE LINK LA TOTALIDAD DE ESOS TEXTOS http://obrascompletasdecassandraydante.blogspot.com  ------