EZEQUIEL WOLF

domingo, 30 de junio de 2013

Domingo 30 de Junio

Entre voces dispersas y no tan lejanas, un domingo a la mañana Cassandra se despertó. Dante dormía. Cassandra abrió los ojos y vio que habían dormido toda la noche con la luz prendida. Rápidamente se sentó en la cama para apagarla, primero había estirado la pierna, pero el largo de su pierna no alcanzaba para poder apretar el interruptor sin tener que moverse mucho. Sentada lo miró a Dante dormir, tan perfecto, tan hermoso, tan desnudo, tan perturbado, tan dantesco, pensó ella. Pensó también si al apagar la luz Dante no se despertaría. Cassandra apagó la luz. La persiana estaba levantada lo suficiente como para que la luz de la mañana que ya estaba entrando en por la ventana a la habitación no dejase notar la falta de luz de la lámpara colgada del techo. Cassandra lo miró todo otra vez, acostado desnudo en la cama, desnudo. Cassandra lo pasó por arriba y salió de la cama. Me voy a bañar y cuando vuelva te voy a traer el desayuno a la cama mi amor. Perdón por haberte hecho rabiar ayer susurró y caminó hasta la puerta en puntas de pie. Por suerte el suelo en esa habitación está hecho de alfombra, pero lo ruidoso son la llave, la fricción del picaporte y el rebote del pestillo cuando vuelve a meterse dentro de la pared. Cassandra se metió al baño abrió la ducha y se sacó el camisón. Una vez que el agua estaba bien cerró la puerta y abrió la ventana del baño, descorrió la cortina y se metió bajo el agua. De pronto Dante se despertó. Abrió los ojos cuando escuchó un ruido del otro lado de la pared. Cassandra tenía espuma en la cabeza del shampoo y mientras se enjabonaba con los ojos cerrados el jabón se le cayó, y ese fue el ruido que lo despertó a Dante. Dante se se puso el jean y bajó las escaleras con la remera y las zapatillas en la mano. El resto de la casa dormía, hasta la gata y el perro. Dante salió a comprar facturas, y cuando estaba en la panadería se acordó que no había más leche, que el sachet de leche lo terminaron de madrugada cuando él se hizo un café con leche para acompañarla a Cassandra en el insomnio, de una noche compositiva y de inspiración. Caminó de la panadería al supermercado por la vereda del sol, con los ojos entre abiertos, todavía lo suficientemente cerrados como para que las lagañas no lo dejase ver del todo. Entró al super, fue hasta la heladera de los lácteos, agarró dos sachets y al llegar a la caja agarró dos chocolates para acompañar el desayuno. Apoyó las cosas en al caja y cuando la cajera le perguntó si precisaba algo más el recordó la charla de antes de dormir cuando Cassandra le dijo "no te ensañes con los chocolates y menos si no están rellenos. Si alguna vez querés regalarme algo regalame una taza", -si, si- le dijo Dante a la cajera, ya vengo me olvidé algo más- y corrió hasta la góndola de bazar donde agarró una taza sopera blanca lisa hermosa y redonda y una taza de vidrio que parecía tallada a mano del tamañaó de una taza de té. Cassandra cerró la ducha y al sacar el brazo por entre la cortina y la pared se dio cuenta que no había agarrado una toalla. En eso escuchó el ruido de la puerta y el ladrido de perro. -Amor estás ahí?- preguntó. Al no escuchar ninguna respuesta volvió a preguntar. -Amor estás ahí?- Al no recibir ninguna respuesta abrió la cortina y se secó con la toalla para secarse las manos. Se secó un poco el pelo, otro poco los brazos, la entre pierna, las tetas, por entre los dedos de los pies y bajó a la cocina para preparar el desayuno. Al llegar a la cocina lo vio a Dante de espaldas sosteniendo una bandeja. "ay mi amor" pensó ella para adentro que no quiso interrumpir la sorpresa y por eso rápidamente subió otra vez las escaleras y se escondió en el baño. Dante salió de la cocina con la bandeja con el desayuno, las facturas, unas tostadas, queso para untar, dulce de leche y dos tazas nuevas con café con leche,y encaró para la pieza a llevarle el desayuno a la cama, -ya habrá salido de la ducha- pensó. Subió uno a uno los escalones lentamente para no volcar nada y cuando estaba por empujar la puerta de la pieza con el pie derecho, se le apareció Cassandra por detrás -Hola mi amor te ayudo?- le dijo y Dante, una de laspersonasmásasustadizasdelmundo volcó la mitad del café con leche de las tazas en la bandeja del desayuno. Dante apoyó bandeja en el suelo. Cassandra estalló en carcajadas y dejó caer la toalla. Dante entró a la pieza, prendió el equipo de música y mientras esperaban que el café con leche se enfriase para desayunar se amaron el uno al otro entregándose a bailar ese domingo a la mañana.


martes, 18 de junio de 2013

DeNosotrosDos

El viento arrulla las hojas de los árboles
la gente corre en silencio antes que el silencio se corte con un trueno
y yo estoy en el colectivo
sentado respirando el perfume húmedo
ese olor dulce a cuerpo
ese que sé que es el tuyo
y que hace que la lluvia no me duela bajo piel.

Quiero y necesito de vos tu carne de sexo
y tengo sed
y estoy hambriento de tus piernas que me abrazan
de tu sexo que me llama porque espera hablarme al oído
y una vez mi cabeza ahí abajo
devorarme, morderme, mordisquearme, y comerme
labios mojados rojos y calientes que rumorean mi nombre
vibrantes y urgentes.

Y sé que ellos me llaman porque la que me llama sos vos.
y sé también que quizás no soy paciente
y espero que me llames cuando yo quiero
o cuando mi cuerpo quiere que me llames...

Vos sabés que no es el sueño el problema
como tampoco lo es que las noches en invierno cada vez duran menos
y que los días cada vez empiezan a durar más
porque en las horas en las que uno está despierto
a sol y a sombra
siempre hace frío.

Hacía el sur de tu voz una historia vive
luz del sol de papel
desvistiéndote en cuerpo y alma
carne fresca de tu sexo de pan
soy yo que te busco
soy yo que te busco a vos
y el cielo constipado enfría la ciudad toda
y mi voz cuando mi boca se calla se acerca a tu boca
porque busca calor y es en ese roce de labios
que mi boca se desata y bueno
tu cuerpo me pide, me desea, me llama
mi cuerpo es imantado por el tuyo que busca
ser piel cubierta en piel por otra piel que es mi piel para que yo deje de estar callado 
y tus labios dejen de hablar
y que todo lo que nos pase nos haga olvidar que afuera el cielo se deshace
que la lluvia se derrite, que la noche está helada y que el cielo se llora todo emocionado y excitado DeNosotrosDos.

miércoles, 12 de junio de 2013

Federico Garcia Lorca

Desnudo estaba ya yo junto a otros más

en la barraca buscando la luna nueva
mientras los gallos masticaban el sol antes de cantar
frente a los falangistas,
y parado yo sin mirarlos a ellos a los ojos pensé
pensé dónde estaba mi luna
pensé dónde estaba mi mar
por qué habría yo de ver a mi muerte en sus manos cobardes,
por qué habría yo de regalarles mi mirada de sangre y de pasión imposible,
por qué habría yo de abrirles mi vida tan viva a su pornografía moral,
porque bien sabía yo que la muerte ya estaba al caerme
como pena de cause oculto en una madrugada remota
ante la muerte que brama en la sangre derramada de mi tierra,
y así estaba yo negando mis ojos de poeta a mis fusiladores
cuando me dieron vuelta para darme dos tiros en el culo,
y acá estoy en una fosa común
brotando en versos de la tierra que soy.

lunes, 10 de junio de 2013

Espejados


Te veo maquillarte
me gusta,
te maquillas dándome la espalda
porque dibujas la forma de tus ojos
con el rimel frente al espejo
y eso me gusta.
Me gusta saberme detrás tuyo
sentado en la cama
me gusta que ahí delante
me sepas aquí detrás
y que en lugar de girar la cabeza
me mires a los ojos
a través del espejo;
Y si
no te lo puedo negar
me gusta que esta habitación te refleje toda
que ilumine y deje a la vista todos tus rincones
que la luz te ilumine toda
me gusta que te maquilles en bombacha y sin corpiño
descalza sobre la toalla húmeda hecha un bollo en el piso
vos recién bañada
yo que me desperté recién
cuando entraste despacito y en punta de pie
para no hacer ruido
pero...
el pestillo de la puerta fue el que te traicionó