EZEQUIEL WOLF

martes, 5 de febrero de 2013

Respiro y Grito, el nacimiento de Eduardo Diez


Para Eduardo Diez donde quiera que esté, ya sea en Marindia, Por ejemplo, ahí donde siempre son dos, no como en esas ciudades en las que la inmediatez por momentos hace que el perfume dulce huela a "cagar más alto que el culo".
El hemisferiogrunge sabe que esta debe ser de las canciones que más ha hecho sonar, no solo de pearl jam sino de todas, de hecho sabe que peral jam y todo ha sido lo que más ha hecho sonar, pero después de todo se sobreentiende que por eso es el hemisferiogrunge, ese porque respirar y gritar a veces son lo que necesita Eduardo Diez* cuando siente que el cuerpo no le alcanza para expresar aquello que las palabras tampoco saben decir, porque las palabras no saben decir, las palabras solo son dichas, pero es que él sabe que la bailarina con espíritu adolescente de a momentos no habla el mismo idioma y entonces él no hace más que intentar respirar y gritar para intentar apaciguar a la bestia pero en lugar de eso sólo consigue agitarse, sentir ese mareo que parece que de una vez por todas dará rienda suelta a los pensamientos...

* Eduardo Diez, un cronista entrado en años ya, que supo dirigir diversos suplementos de índole periodísticos, pero por razones personales, (su corazón) tuvo que abandonar la profesión, para dejar de querer ser Hemingway y empezara ser un poco más él.
Eduardo era de esas personas que odiaba la música en Ingles si había sucedido después del 1 de enero de 1959.
Pero que el día que escuchó esta canción en de los auriculares de una bailarina que huele a espíritu adolescente que aturdía sus tímpanos con esta canción mientras revolvía cajones de libros usados en librerías de corrientes, Eduardo le preguntó cómo se llamaba la canción, y ella al no saber Ingles, sacó el Mp3 de su bolsillo, le mostró el nombre y juntos se fueron a tomar un café, donde él le tradujo ese y muchos otros temas más, y ella, le tradujo esas cosas que él había dejado congeladas cuando jugar a ser Hemingway pesó más que intentar ser él.

domingo, 3 de febrero de 2013

Reflexiones de madrugada Vol. II



…seguramente quien lo escribió lo hizo con marcador indeleble verde de trazo grueso con punta chata porque fue así como le enseñaron a rotular. Quizás en una escuela técnica o bien en alguna materia terciaria o universitaria relacionada al diseño, o simplemente compró el marcador en un kiosco.  Lo que si, sin ningún tipo de duda fuera quien fuese pertenece al grupúsculo de gente a la que las clases de caligrafía perturbaron el dibujo el dibujo de sus letras al punto que el gozoso e irremplazable acto de escribir a mano se volvió en una eterna y perpetua clase libre de dibujo.

Y es que de verdad yo nunca pude sostener los garabatos y la forma de las letras igual, con la misma cadencia por más de una palabra, independientemente de la imprenta o cursiva, o mayúscula, o minúscula; De hecho ni siquiera escribiendo a máquina o en computadora puedo tener una escritura pareja.

Escribo por corrientes respiratorias. No es que inhalo, proceso y al exhalar escribo hasta que el aire se acaba, pero más o menos, que se yo, hay momentos en los que el aire salió por completo de adentro mío y las frases o las palabras no dieron los suficiente y entonces o sigo intentando sacar aire de donde no tengo o inhalo, pero que se yo, no estaba hablando de mí ahora. Estaba hablando sobre el cuaderno que encontré en el baúl.
Vuelvo…

Yo supe de alguien que escribía mucho. Todo el tiempo.
Decía que le gustaba leer, y mucho, pero que más le gustaba releer, ir y volver, releer, como recomenzar. 
Quizás tenga que ver con que al releer uno está atado al pasado eterno en el que fue leído aquello que se está releyendo y a lo que se quiere volver. Es tan mágico eso. Uno vuelve a leer muchas veces para volver a buscar esas sensaciones que quedaron ahí entre las hojas, los olores de las manos transpiradas en el colectivo cuando estabas por bajarte en la parada siguiente, y justo que lo que estabas leyendo se estaba poniendo bueno, y el frenesí de leerlo lo suficientemente rápido como para no cerrar el libro, y subir y bajar la mirada casi sin pestañear para no perderse nada, ¿cuánto falta?, bajar la mirada otra vez y buscar las últimas palabras que estábamos leyendo, el dedo señala flores abiertas sin importar cuánto tiempo sea lo que dure, pero eso ya lo leíste y el colectivo avanza y te tenés que bajar pero levantás la vista y ves que el colectivo parece haber retrocedido unos veinte metros, entonces bajás la mirada otra vez y está al final de la página marcado con lápiz en el márgen, sin la nostalgia de la memoria… y cuando das vuelta la página te das cuenta que habías terminado el capítulo y cerrás el libro con el lápiz dentro como señalador, pedís permiso y te bajás con la velocidad suficiente para llegar a tu casa y seguir leyendo, pero con la tranquilidad que pudiste llegar con la lectura a tiempo.

Pero yo estaba hablando de alguien a quien le gustaban los libros. Es más cuando le preguntaban si le gustaba leer, decía que sí, pero antes de cerrar la idea, o dar lugar a una repregunta, automáticamente disparaba sin pudor que le gustaba mucho más escribir. Vértigo. Sensación de hojas en blanco como cantidades industriales de agua esperando para caer del trampolín hacia la pileta inundándola y empapando al náufrago, sumergiéndolo en su nuevo naufragio. –Escribo para dejar de escribir…– esa era su carta de presentación cuando alguien le preguntaba si le gustaba escribir… – Es que escribir para dejar de escribir no significa que sufra al escribir, no al contrario. Disfruto de escribir, me gusta escribir y es por eso que cuando me paso un tiempo determinado sin escribir, me siento raro, hasta nostálgico te diría… Nostálgico en algún punto y melancólico también. En serio, anhelo la sensación que sentí al haber escrito algo. –

Hubo un libro que le cambió la vida.
Era de madrugada y el día de su cumpleaños recién estaba izándose, pero cuando sonó el timbre de la casa en la que se crío faltaba más o menos una hora. Por esos tiempos aún vivía con su hermana, el gato y los dos perros en la casa que se crió. Sus padres ya se habían ido cada uno por su lado y en distintas direcciones. Su hermana abrió la puerta y se presentó. – Adelante, qué tal, mucho gusto, mirá está durmiendo en su pieza, pero subí que no hay ningún problema. La puerta de madera con vidrios a la derecha, subís la escalera caracol y por ahí hasta el fondo. Fijate que quizás esté la puerta cerrada pero abrí sin miedo. Bah, que  boluda, ya sabrás que hacer…–

Estado de ensoñación:
Movimiento ocular rápido y mientras dormía a la espera de su cumpleaños murmuraba… Ese soy yo contra las cuerdas. Ese soy yo en el punto de mira. Perdiendo mi religión. Intentando seguir contigo y no sé si podré lograrlo. Oh no, he dicho demasiado y no he dicho lo suficiente. Creí oírte reír, creí oírte cantar, creo que me pareció haberte visto probarlo. Cada murmullo. De cada hora en vela escogiendo mis confesiones, intentando no perderte de vista como un tonto herido, perdido y ciego. Oh no, he dicho demasiado.* Hay veces en las que los susurros cuando uno duerme están tan empastados que no se entiende nada, y por suerte la música que suena en la cabeza de uno cuando se está dormido no sale, no suena hacia afuera. No. Concierto orejas hacia adentro. Boca hacia fuera. Ésta fue una de esas veces en las que la canción del sueño se termina por la mitad cuando un ruido exterior se cuela, enmascaramiento. Ruido de fondo en la escalera que se acrecentaba cada vez más. Puerta corrediza abierta. Pasos detrás de la puerta. Abrió los ojos cuando detrás de si abrieron la puerta. –Hola mi amor! Me dijo tu hermana que estabas durmiendo. Ya sé que falta un rato pero la verdad es que quería venir a estar un rato con vos antes…– dijo mientras descolgaba su bolso verde por encima del cuello para sacarse la bufanda primero y después el saco, para después volver a colgar todo en la silla en el orden inverso. Perfecto. Todo parecía indicar que nada de lo sucedido párpados adentro había sonado hacia fuera del anfiteatro de su cabeza. Todo estaba bien. Su pareja abrió la puerta un segundo antes de que abriese los ojos por lo que nada de todo lo soñado pudo haber sido oído, aunque hubiese sonado por el equipo de música y a todo volumen. Acostados los dos en cucharita, de espaldas a la pared y mirando la puerta dejaron pasar el tiempo, esperaban que las agujas cruzasen las 23:59, para que a partir de las 00:00hs todo cambiase para siempre. 23:59:24 se oían arañazos, forcejeos, era el gato, Viento que no quería perdérsela y se hizo presente. –Quedate en la cama amor yo le abro. Vení Viento…– 23:59:32 la puerta se abre y Viento entra de un salto pero se queda debajo de la silla frotándose contra el tapado, no es boludo esconde el cuerpo pero deja la cabecita afuera, no quiere perderse nada, 23:59:39 y desde la cama se escucha…– Vení amor, acostate acá conmigo, dale un ratito más total no va a llamar nadie, ya le dije a mi hermana que si llama alguien diga que estoy durmiendo además de la familia no creo que llame nadie hasta después de la 01:10 hora en la que nací – 23:59:53 – Ahora voy, esperame que me parece que me olvidé las llaves de casa…– 23:59:58… 23:59:59… 00:00hs Mano en el bolso –Feliz cumpleaños…– se escucha el grito de su hermana desde abajo. –Acá está amor tomá para vos, feliz cumpleaños…– Un paquete forrado con papel de regalo de libros, como el empapelado para las piezas de nenes chiquitos que simula ser una biblioteca. – ¿Qué es?– pregunta sin obtener respuesta mientras rompe el papel y adentro hay una caja de un portarretratos… – ¿Una foto de nosotros dos? ¿Cuál?– Sostiene la caja con la mano izquierda contra el muslo de la pierna derecha. Intenta abrirlo con la mano derecha pero no quiere romper la caja. Se sienta en la cama. Apoya los pies en el piso y acuesta la caja sobre las dos piernas mientras su amor lo mira de rodillas desde el piso esperando verle la cara para capturar ese preciso instante en el que el regalo le despierte una sensación desconocida hasta el momento. Apoya la palma de su mano izquierda en la caja y con el pulgar de la mano derecha consigue abrir la caja. Mete la mano y saca un libro de tapas rígidas. Desórbita y desconcierto. Palabras recortadas y pegadas como un collage decoran el libro. Lo abre. Primera página en blanco, segunda página en blanco, tercera página se da cuenta que está al revés. Cierra el libro y lo da vuelta. Lo abre otra vez primera página en blanco, saltea la segunda página y en la tercera lee su nombre. Sigue ojeando sin pestañear y con la respiración contenida, las piernas no le responden, el funcionamiento de su cuerpo está en piloto automático, todos en la habitación miran cómo recibe su regalo, nadie quiere perderse cualquier gesto, sonido o movimiento que pueda llegar a hacer en efecto al regalo. Abre una página al hacer y al ver que no están enumeradas empieza a leer palabras que le resultan familiares, cambia de página otra vez…en la profundidad del sueño… Cierra el libro, lo deja en la cama y dice –Amor son mis palabras, es un libro con mis palabras, me hiciste un libro. – El aire se torna tenso. –Sí, lo hice para vos…–

La cuestión era la siguiente: Acababan de cumplirle el sueño secreto de toda una vida sin siquiera haberlo pensado en voz alta. Hasta ese momento nunca había pensado en la posibilidad de sentirse como una persona nacida para escribir. Solo se consideraba alguien que escribía. Acababan de cumplirle el sueño secreto de toda una vida sin siquiera haberlo pensado en voz alta. El libro estaba impreso en papel fotográfico. Alguien había conseguido comprender en ese instante que los poemas o las sensaciones son como fotografías, que la realidad es una secuencia de fotogramas. Fue a partir de ese momento algunas cosas cambiaron para siempre para quien recibió semejante regalo, como también cambiaron para mí…

Hacía algún tiempo en un taller literario al que no fui más que algunos meses, porque, dicho por voz de quien lo dictaba, –seguir viniendo te va a cortar las alas. Escribí, vos dedicate a escribir. Con lapicera, con lápiz, con marcadores, con crayón. Vos escribí. Escribí en las paredes, en las hojas de carpeta, en los volantes que de tan en la calle, en los márgenes de los libros, de los diarios. Si ves que no podés volar volvé y vemos si tirándote desde este primer piso conseguís volar… – aprendí lo que era un haiku: Poema de tres versos, dividido en 5, 7 y 5 moras o sílabas de origen japonés, pero no fue hasta dar con ese libro que entendí el sentido del haiku: Poema de tres versos, dividido en 5, 7 y 5 moras o sílabas de origen japonés que cargado de simpleza, en sus orígenes estaba ligado a las estaciones de la naturaleza pero que con el correr del tiempo se ha hecho permeable también a la pictorización de situaciones o sensaciones en algunos casos epifánicas. Desde ese entonces yo juego a construir haikus, como fotografías capturadas por mí en el lenguaje con el único fin de darme el gusto de poder unirlo todo desde mí, como un rayo.

*R.E.M-Losing My Religion.

sábado, 2 de febrero de 2013

Ron llueve sobre si mismo

Acá el audio del Texto

Ron es de esas personas que jamás hizo las cosas a su tiempo, no. Más bien desde su nacimiento, un lunes 10 de noviembre, cuando su padre fue al médico por un dolor en la espalda y le diagnosticaron un dolor crónico en 7 vértebra, un pinzamiento, era esa la explicación real y física al dolor de cabeza y sus malas posturas frente a las cosas que al venir no hacían más que pesarle o bien adormecerle los brazos y las piernas ante el primer atisbo de movilidad.

Ron no hizo más que nacer del llanto de su padre y del vientre de su madre que harta y cansada de verse sumada al martirio de ser la actriz principal en un acto sexual, simplemente dijo basta. Ron nació así, nació de ahí y en homenaje a Norberto, como uno de los tantos retazos que pasará a la historia por no darle importancia al cuerpo. Ron es alcohólico, así como se lee. Ron nació en Baires. Falso acrónimo de Buenos Aires, Capital Federal según se dice, de la República Argentina. Un 10 de noviembre de 2008 exactamente 48 horas de que fuera fuese tía por primera vez, tía de mellizas, así es. Varios meses antes, Vera supo anticipar el nacimiento de los Femme Angels, más precisamente un almuerzo a cielo abierto en un jardín familiar donde el embarazo todavía era algo más que un secreto.

Ron nació el 10 de noviembre honrando el aniversario de la muerte de Jean Nicolas Arthur Rimbaud, poeta francés, otro gran vidente que se hizo carne en la inmensidad de la videncia, de poemas coloridos, imperfectos, puros, y desarreglados en las formas. Rimbaud un maldito, un decadentista, así es, decadentista si y no decadente. Decadentista si, también parnasianista, (relativo al parnasianismo, una corriente literaria que nació en Francia para contrarrestar al romanticismo de Víctor Hugo entre otras disciplinas). Poeta lumínico y ardiente. Extremista y sediento. Rimbaud dejó poemas, poesías, cartas. Rimbaud dejó huellas, dejó obra, en prosa y verso. Rimbaud dejó verbo. Iluminaciones y Una temporada en el infierno. 
Rimbaud hermoso y visceral conjugando el cuerpo.

Ron nació el 10 de noviembre honrando al hermoso poema de Federico García Lorca llamado Si mis manos pudieran deshojar la luna. Lorca inmensamente puro, gigante y hermoso, que muchas veces se lo menciona sin siquiera haberlo leído, ¿No? ¿Por qué? Algo así como darle lugar a lo que es la gloria, el hecho de que su figura sobrepasa su obra sin siquiera haber sido leído o aun así vivo en la boca de todos los que lo nombran porque su nombre es poético, y porque es hermoso y porque suena tan bien.

Ron nació el 10 de noviembre honrando a Mora que se fue de la casa del viento donde supo encontrar su lugar en el mundo, en una cama gigante y roja, hecho un bollo enrollado sobre si mismo acostado sobre su brazo izquierdo, en posición fetal con la cabeza apoyada sobre la mano derecha que acaricia el colchón con las líneas de la palma de la mano, y con la mano izquierda con la muñeca boca arriba y abierta abrazando, recibiendo el peso de la pierna derecha, mirando a la ventana con las persianas bajas a orillas del boulevard trazado por el tren. Mora tal como supo relatar Vera en Retazos en la casa del viento, se fue con la idea de llevarse todo el aire, todo el arte, toda la sangre, todo el amor, todo el fuego de ese nido de amor donde supieron verle la cara a dios donde supieron verle la cara al amor y dar lugar a Ron.

En fin.
Aquí lo de antes y lo de siempre.
Siempre, cuando alguien es capaz de llegar a las puertas del orgasmo,
a vislumbrar los primeros pasos del clímax ejerciendo la arbitrariedad de los deseos
siempre hay alguien que apaga la luz,
como si el sexo, el orgasmo, el acabar y la consagración no pudieran
o no mereciesen ser vistas a los ojos…
Por favor bajame el cierre.
Quiero que me tapes la boca.
Quiero que mi apetito sexual se caiga antes de salir de mi cama.
Quiero que no pueda encenderse en ese fuego que sueña en llegar a tu luna.
Aún cuando me digas que no dejaste irse al cuerpo del amor.
Aún contra la fuerza del desamor que siempre pega, pisa y golpea más fuerte.
Aún cuando digas que fue culpa de los Femme Angels te seguiré esperando entre
promesas engañosas donde el diluvio arde porque el tiempo se mide por intensidad
y la piel es mucha más que años de distancia.

martes, 29 de enero de 2013

OTRAVEZGOTEA: ELCUERITOSEROMPIÓ.


 …y desesperada Irina se dio cuenta en ese momento, por el contraste de la rejilla del trapo con el aluminio liso del fondo de la pileta que la canilla goteaba. Intentó cerrarla con la mano izquierda pero no pudo. Pensó en hacerlo con las dos juntas, y para eso dobló el trapo en dos, y sosteniéndolo con las dos manos envolvió la canilla, la giró con fuerza hasta cerrar y matar así al goteo.
 –Puta madre, otra vez este cuerito de mierda – eructó con bronca. 
Es que en los otros departamentos en los que vivió, el aviso surgió a partir de ese momento en el que el agua se filtra por alguna de las juntas y entonces es probable que la humedad se lo coma todo como un cáncer.
 – El enamoramiento de una casa nueva no dura más que el cuerito de la canilla – dijo asomada en la mesada y con los ojos fijos revisando que no hubiese una gota a punto de caer de la canilla o brotando de las raíces de las llaves. 
Lo que la distingue a Irina, hasta más que las vinchas o los pañuelos en la cabeza, es la precisión de los cueritos de las canillas. Ni bien la canilla empieza a gotear, eso ya es motivo suficiente para que Irina se declare en campaña, primero mental y después física, para la búsqueda de un lugar nuevo para vivir.
"Lo primero que se hace es dar lugar a la idea, y con ella se agarra un pedazo de masa para buscar el ideal, y después en base a eso se empieza a tallar el diamante en bruto hasta finalmente mudarse… …sensación de terminar un rompecabezas de 7000 piezas…" dice sentada en el umbral de la puerta de calle fumando con las piernas cruzadas.

sábado, 12 de enero de 2013

de la boca del mar

"mirando el mar, mi espalda para vos, un pentagrama" susurró Mina acostada en las escolleras de espalda al sol y se durmió en el rumor de las olas que rompían ahí nomas mientras Camilo la acariciaba arpegiándole la espalda componiendo melodías de amor que juntos después a la tarde en el departamento repasaron una y otra vez bajo la ducha lavándose de toda la arena que arrastraron desde la boca del mar.

miércoles, 2 de enero de 2013

un lugar

respirando el mar con los brazos abiertos
hoy para el amor ya no cuento el tiempo
soy en un lugar
en tu esfera
carne inmensidad y miel
hay una canción que vive bajo tu piel
y yo estoy
y vos lo sabés y ella también
primera y quinta
ni menor ni mayor
ni hombre ni mujer
solo una canción
de mí voz y tú piel

domingo, 30 de diciembre de 2012

miércoles, 12 de diciembre de 2012

Jaguaretes

... y es que vuelan alto Calo y Lynn dos que se mastican al aire libre en la sobremesa de su cita aniversario, porque el postre después de la entrada, primer plato y segundo plato parece que no alcanzó; si encima tenemos en cuenta que sus cuerpos burbujeantes venían celebrando desde la noche anterior, y que se conocieron hace exactamente un año cuando los dos se vieron a los ojos en ropa interior acostados el uno frente al otro en la vereda, y para sorpresa y azar el motivo de la ropa era el mismo...

sábado, 8 de diciembre de 2012

8.12


Desde el mar
las casas y los ojos a mi alrededor
espías al resguardo de nuestra función
voraces, sigilosos al atardecer

enredados en palabras para florecer
piedras del bien y del mal 
alas libradas a desperezar el sueño
y una puerta entre tus piernas es la inmensidad
y en la puerta una escalera a la libertad
y la voz sedienta grita a la creación:

cambia, todo cambia

música en pétalos, en retazos y en aromas
el amor, un juego que involucra al cuerpo
lo que es amar
lo que es el mar
lo que es tierra
un escenario

viernes, 30 de noviembre de 2012

Mi nombre y apellido


En la búsqueda de verte acostada en el suelo
como en un sueño
rodando sobre vos
mirándome sonreírte
mostrándome tus dientes
como interminables 18 mil dientes de esmalte
te reís
te reís y me mirás
y girás sobre vos
verbo conjugado en tu humor propio
-hola- decís con los párpados entrecerrados
los labios pegajosos que no podes despegar del todo
hasta que un bostezo nace de vos
y te fundís en él
espasmo del movimiento
y gemís sedienta de despertarte
y te desperezas frotándote contra mí
enredada entre mis piernas
y me escalás desde la cintura a la boca
y me conquistás el cuello diciendo que amás mi nombre y mi apellido.

martes, 27 de noviembre de 2012

15:07 en Baires



...Ale se arrodilla en la cocina de su casa a limpiar el suelo.
Anoche salió y volvió a las 8 de la mañana totalmente dado vuelta.
Pintó el piso flotante con sus vómitos sangrantes
consecuencia de un certero golpe al corazón
por la que tampoco escuchó el despertador
y por eso cuando se despertó ya era tarde.
En el trabajo le habían advertido que no tolerarían otra llegada tarde más,
Así que fue hasta la cocina para hacerse un café con leche y lavarse la cara
y ahí nomás vio su Vomir, souvenir de la noche del reviente...
Ale se arrodilla en la cocina de su casa a limpiar el suelo
y es en esa flexión que su único Jean celeste ya gastado se rompe
y lo bautiza con una hermosa Onomatopeya
“GRUNGE”

lunes, 12 de noviembre de 2012

LitGrunge Vol IV

Noche primaverales en el sur de la tierra noches donde lo salvaje bulle en la sangre noches donde los estornudos alérgicos cierran los párpados y los ojos aprovechan la fotofobia para justificar un par de lágrimas noches donde la cursileria se desata y después de todo para eso existe el amor para demostrar que las palabras a veces no alcanzan" escribió Eduardo Diez en una servilleta en una pizzeria de la calle corrientes, ahí nomas en el centro cerca de donde vive la chica que huele a espíritu adolescente, ahí nomas al borde de donde ellos solos pueden más que el amor y son más fuertes que el Olimpo, y entre borracho, desorientado y un poco inconsciente caminó con la carta en el bolsillo arrastrando los pies hasta que tropezó con una baldosa floja y se sentó en un umbral en el que se sentó a leer lo que había escrito "Noche primaverales en el sur de la tierra noches donde lo salvaje bulle en la sangre ..." y empezó a susurrar el texto, "... noche donde el los estornudos alérgicos cierran los párpados" y entonces levantó cada vez más la voz " y los ojos aprovechan la fotofobia para justificar un par de lágrimas " hasta que finalmente se puso de pie y gritando hasta raspar la garganta desató lo que faltaba " noches donde la cursilería se desata y después de todo para existe el amor para demostrar que el lenguaje a veces no alcanza" y así lo leyó una y otra vez llorando cada vez más fuerte hasta que entre tantas lágrimas desató una sonrisa y fue una de esas carcajadas lo que hizo que una chica que había estado durmiendo plácidamente se despertara y al asomarse por la ventana descubrió que el poeta borracho no era otro que nuestro querido Eduardito Diez, que no se dio por enterado y que al verla a ella la chica que huele a perfume adolescente abriendo la puerta del umbral a las 3 AM se abalanzó sobre ella y entre abrazos y llantos se desarmó hasta quedar los dos acostados en el piso con la puerta abierta comiéndose a besos.

viernes, 2 de noviembre de 2012

YALODIJOMIKE: “TUDOLORESAMORTRANFORMÁNDOSENMUNDO”. 1/8

Mirá el reloj, son las 5:08 ¿Qué excusa tenés? Ahora qué vas decirme Luna? - Le dijo Cristina a su hija desde la puerta de la habitación apoyada contra el marco de la puerta con el hombro derecho y sosteniéndose a la vez con la mano derecha y haciendo peso sobre su pierna derecha también, para no perder el equilibrio. Luna sabía perfectamente qué hora era pero en ningún momento sintió que fuese tarde, ni mucho menos que para estar despierta, aun, a esa hora como a cualquier otra, fuese necesario tener una excusa. Sentada en una silla de patas metálicas con respaldo y apoyaculos naranja con olor setentista y nuncademodé, Luna tenía las piernas cruzadas. La derecha colgando por sobre la izquierda hacía un rato largo ya, manía que descubrió años después de haberlo hecho por primera vez, quizás imitando la pose de algún superhéroe pelilargo músico, actor o escritor, quizás de algún poeta, o de una mujer nerviosa a la que vio sentarse así para encontrar su centro, para concentrarse en ella para centrar el peso de su cuerpo todo en la totalidad del cuerpo contorsionado sobre el pecho contra el muslo de su pierna derecha. Hacia varias horas que estaba sentada frente a la computadora jugando a ser canal de su propia escritura automática con el sonar de fondo de viejos programas de radio grabados todavía en Casette. -Che! Carajo te estoy hablando!- -¿Qué querés mama? -Que mires la hora que es! ¿Qué hacés todavía despierta a esta hora y encima afuera de la cama? –

miércoles, 31 de octubre de 2012

LAHISTORIAESELVIAJE

Quiero. Quiero viajar. Quiero viajar lejos. Quiero viajar lejos porque necesito hacerlo. Por empezar no creo que la niebla solo pertenezca a Londres como tampoco que Buenos Aires tenga que ser para siempre tango. Quiero viajar porque acá me siento estancada, quieta. Me siento quieta y quizás no sea por este lugar, por esta ciudad, por este país. No. Pero es que quiero viajar. Extraño esa sensación de estar en viaje y a minutos de llegar a destino ya sentirme ajena, y con piel distinta, con una piel nueva. Es que cuando se viaja uno no tiene miedo a perderse, porque no se pierde. Una cuando viaja no se pierde. Una cuando viaja está dispuesta a caminar, se puede programar desde el vamos y también consultar si es que hace falta, pero también cuando se viaja y se descubre desde los ojos propios cualquier lugar está permitido caminar sin preguntar, está permitido ser ojos vírgenes, y todo lo que vemos es nuevo, y todo lo que respiramos también puede ser frío… Nunca fui al cine en otro país, si en otra ciudad, pero nunca en otro país. ¿Cómo será decidir qué película mirar? ¿Cómo saber en qué sala? ¿Hablarán tanto en los cines afuera? La verdad es que las últimas veces que fui al cine no sé si hablaron tanto. ¿Será que ya no se habla en el cine? ¿Será que aprendimos que es en uno de los pocos lugares donde verdaderamente no se debe hablar? Hacía tanto que no iba al cine. Es que prefría mirar películas, algunas pocas sola en casa, y sino con algunos más en alguna otra casa. Porque hablar, hay que hablar, pero para hablar primero hay que mirar, y una vez terminada la cinta y masticando una reflexión interna previa, ahora si se puede hablar. Quiero viajar para dejar atrás el pasado caníbal. Quiero viajar para no pensar en el tiempo. Quiero ver florecido el futuro que sembré de un tiempo a esta parte. Quiero ver las huellas de luz. Quiero viajar para dejar atrás el pasado. Quiero viajar porque no quiero escribir más mirando el pasado. Quiero viajar porque quiero viajar en presente. Quiero viajar lejos. Quiero viajar lejos, aunque sea 5 minutos. Quiero viajar 5 minutos de futuro para saber cómo es. Quiero viajar para responderle a mis ilusiones, a la carne del deseo.

jueves, 25 de octubre de 2012

ElKarmadeViviralSur:


‎"-...lo cierto es que no sé qué disco de García elegir, porque hay discos que me gustan menos es cierto...”- Dante y Cassandra la miraron a la Suzanne que hablaba por teléfono con un programa de radio.
Dante y Cassandra se miraban y se besaban.
 Se abrazaban se miraban se besaban y  el colectivo que seguía sin aparecer.
En eso Dante bajó a la calle y vio a lo lejos que el colectivo estaba por llegar a la parada anterior, y le dijo a Cassandra, ahí viene.
Suzanne dio una última pitada al cigarrillo, asomó la cabeza vio que el colectivo era ese  y dijo "-...es Parte de la Religión"- y colgó.
El colectivo siguió de largo, con el chofer señalando el cartel “FUERA DE SERVICIO”
y los tres se miraron cómplices,  dijeron, “y sí, El karma de vivir al sur..." y se fueron a tomar una cerveza!

miércoles, 24 de octubre de 2012

Love Is Amor


Tan despacio, 

para volver a decirlo de algún modo
no me percaté en realidad.


-¿Qué pensaste?
-Bueno, en realidad…
-No preguntes más…

Tengo la voz cerrada
las manos hablan desde mí
y los ojos están dormidos.

Hablar. Quiero verte,
en silencio, es verdad.
¿Hace cuánto no nos vamos en silencio?

-Soy de aquí.
-¿Y yo?

La mañana enmarañada
y no quiero ir, no quiero irme
y las vueltas siguen rondando
y el futuro es incierto
y el final siempre parece estar cerca.

Concreción:
Concreto. Compacto
Soluble.
Volátil.

Algo más que yo no sepa…
y no sé si me dijiste así porque no importa, no, no sé,
no me quiero ir,
no quiero que te vayas…

El aire está cargado y no puedo dormir, necesito verte antes de dormirme:
Sentencia.
Sé que no voy a irme al sueño.
No quiero dormir, no puedo.
No quiero dormir, quiero estar despierto.

El viento ruge, se agita el cielo
el aire se acomoda a las formas y yo no puedo dormir.
Vi tu boca en la luna y salí a buscarla.
Salí a correr, salí a buscar la voz,
una pócima de viento.

“Los globos sobrevuelan las paredes de la soledad”.



La noche cubre todo el cielo,
es todo tan fugaz.
Al unísono el caos,
los hilos como voces disonantes.


Los ángeles están destellando su voz,
recuerdan incluso cuando soñaban con volar
vibraban pasivos a 5 centímetros del suelo.
Torres de cristal, flores amarillas.

Declaración de principios.
Declaración del principio.
Declaración desde un principio.
El aire muere en sensaciones tan vivas.


A ver…
Despacio, de espaldas
bailando melódicamente
un susurro al oído
creo que estás llorando.
Estremece pensar.
Estremece pensarlo.
Estremece pensar en algo más que una imagen.

Es de noche suene donde suene
noche azul, noche púrpura
una noche en la búsqueda del alma
conversación, fricción, arremolinados,
filosos por quienes se callan,
filosos, fricción, arremolinados,
conversación por quienes quieren hablar.
La lengua gastada contra el paladar que suena a experiencia,

Un Beat, sí, un golpe.
Un Beatdown, si, un golpeado.
Un Beatnik, no, un espía subjetivo en la relatividad del tiempo.

Espera,
áspera espera.
Esperan la voz espesa que quiebre la tensión,
la sensualidad agobia y el aullido perturba, raspa
la lengua ebria vomita flores en tu oído primal.
Incomoda lo oscuro, lo falto de luz y sin embargo por eso molesta
porque es un golpe, una serenata en la vida real.

-Vos escribiste una vez que el silencio dice más en este reino.
-¿Yo escribí eso? Es tan cierto…

Siento al amor como una ceremonia en la sangre
y ahora tengo frío.
Siento al amor como una ceremonia en la sangre
y ahora tengo tanto sueño.

Hay algo de uno en el otro.
Enlazados
Enamorados
Enraizados
Enmarañados
Enarbolados
Sumergidos en los ojos profundos
en las aguas del mar son refugios conversos en la memoria del agua
y los ojos se ven, se cruzan
se superponen, y otra vez están los pétalos que descubren la asunción.
las manos florecen

El amor es natural.
El amor es sangre.
El amor es lluvia.
El amor es sol.
El amor es sexo.
El amor es magia.
El amor es viento.
El amor es rabia.
El amor es cielos.
El amor es agua.
El amor es calor.
El amor es tiempo.
El amor es noche.
El amor es cuerpo.
El amor es distancia.
El amor es silencio.
El amor es luna.
El amor es dolor
El amor es frío.
El amor es fuego.
El amor es ojos.
El amor es ciego.
El amor es tacto.
El amor es vértigo.
El amor es poder.
El amor es sentimiento.
El amor es sensación.
El amor es real.
El amor es velocidad.
El amor es lento.
El amor es mar.
El amor es amor.

lunes, 22 de octubre de 2012

Esqueavecestodoloquenecesitamosesunpoquititodepaciencia:


Lunes otra vez, dice una canción, pero nada de lo que pasó ese lunes fue parecido a otro lunes,
y eso que aquel lunes estaba horrible, nublado denso, con el cielo constipado y frío sobre baires”. 

Cassandra y Dante dormitaban esa mañana de lunes, después de una madrugada en la que el (mal) sueño, la sobreabundancia de cosas en un cuarto improvisado con una cama
y una ventana que no dejaba ver el cielo, los expusieron incómodos, perturbados,
cada uno buscando estar con el otro
pero sabiendo se que sólo necesitaban dormir...
...el trajín de vivir, de viajar para ver, de respirar y mirar, de cantar y recorrer, y recorrerse y soñar, y volver a caerse y entonces renacer otra vez como en cada despertar,
después de haber cerrado el telón de los ojos café con leche,
café con leche en mano cantando o bailando o tarareando alguna canción…
no mucho más para decir
un par de horas, el tiempo,
el tiempo, un par de horas,
una ruta y la excitación a la atura de las circunstancias...


sábado, 20 de octubre de 2012

Leséfer


/a los presentes:
lo que ayer soñamos
hoy es Tornasol/



Dijo Pedrito Miller cuando le preguntaron por Tornasol:
 “Nacido de un hongo y un alga un liquen es un organismo capaz de mimetizarse, de colonizarlo todo. Un ejemplo de esto es el Tornasol. El Tornasol es un reactivo  que en contacto con ácidos se torna en sol, (rojo-anaranjado),  y se oscurece con lo alcalino."

Conclusiones de Shannon en una noche de ensueño:
“…los matices de la voz resaltan entre guitarras filosas, y melódicas cuando la canción lo pide, sostenidas por un bajo imprescindible y sutil abren paso a los golpes que arremeten contra los parches siempre a favor de la canción, siendo Tornasol lo que buscaban desde  que consiguieron caminar los Puentes de Pasto…”                               

Escribió Mora caminando las ciudades del mundo:
“…y yo que caminaba con mis auriculares grandes por ciudades viejas de Europa y Asia hasta que mi cabeza fue atravesada por un disco, universo de matices y sensaciones encontradas en canciones, y entonces el rancio gris de mi alrededor se volvió tornasolado…”

Palabras de Ariadna a la salida del laberinto:
 “…yo dormía en las puertas del laberinto tranquila cuando de repente 4 mimos pasaron corriendo por encima mío al grito de Carmen, y tras ellos una mujer ahogada en un grito sordo denunciaba Abriré. Lo cierto es que ahí comprendí que lo único que me quedaba era respirar el frío intenso…”

Fragmento de un pasacalle hecho por Velano:
 “...y es que yo he visto cómo Mora salió a caminar encandilada por la ciudad y sin destino fijo. Soy de los que piensan que algunas canciones están en el aire, y yo tuve el privilegio de ver cómo varias de estas flores han nacido, y por eso me siento autorizado para decir que la vendimia ha traído la belleza eterna…”

Reseña escrita por Suzanne como una pasajera en trance:
“…parece mentira que mi cambio de nombre haya sido una mera casualidad. Mi nombre nació de una canción en la que el personaje principal te da té y naranjas, y la causalidad marca que las canciones que componen este disco, además de los climas, tienen algo de naranja, y algo de lo hermoso y artesanal que evoca la imagen de alguien exprimiendo el jugo para acompañar la dulzura de un té en algún panal…”

jueves, 18 de octubre de 2012

Y como Icaro en el cielo azul


"Mi amor es mío, porque es mío con propiedad y no propiedad. 
El amor no es de nadie ahora que lo pienso. 
Quizás no sea nunca de ninguno de los dos. 
Quizás sea solo simplemente algo que estaba ahí 
y nosotros dos simplemente estábamos ahí cuando cayó y atravesó la escena, para que ella y yo encarnásemos nuestros papeles antológicamente modernos como ser Ella y El"
Ezequiel Wolf....La melodía desencadenada.